Hay palabras que deberían ser enviadas a una clínica para palabras donde se las curara del mal uso que se ha hecho de ellas. De la mala fama que les ha caido encima, cuando nada mas lejos estaba de sus intenciones.
CONSTRUIR, tanto usada como verbo o sustantivo (construcción), es en este pais actualmente una palabra maldita, el germen de todos los males, el escondite de los especuladores, la causa de la ruina de muchos, la desesperacion de parados y familias.
Pero sería bonito poder curarla, darle nuevo y mayor sentido al dirigirla a las relaciones personales, que todos los días cuando creamos algo entre nosotros, algo que dure, un recuerdo, un proyecto, una llamada postergada que hoy por fin hacemos, pensemos que estamos construyendo una realidad mejor. Una realidad que no especula para obtener un beneficio mayor del lógico, que construye para perdurar, que construye para que los demás puedan poner un ladrillo mas sobre lo que nosotros hicimos, o que tal vez sirva para que desde allí se asomen a ver mundo.
Solo los que lean esto podrán entenderme cuando les diga que "he decidido dedicarme a la construcción".
1 comentario:
Tiempos difíciles para los que empiezan a "construir" su vida.Nosotros por suerte llevamos unos cuantos años en el "andamio" pero siempre queda por hacer. Como bien dices,marcar la ruta de los que vienen detrás.Quizás ha sido mas fácil cargar ladrillos que sólidas piedras (de las que están hechas las humildes iglesias y las grandes catedrales que permanecen por siempre)......
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